Una vez que pasa el día de Reyes, las navidades
Volver a la rutina del ejercicio y la comida sana puede resultar complicado para muchas personas, sobre todo para aquellas que comenzaron tras el verano, y todavía no tienen una rutina tan sólida. Es fácil dejarlo en Navidades y no volver a hacer dieta o ejercicio, pero con fuerza de voluntad, este obstáculo debería salvarse. No debemos obsesionarnos tampoco con adelgazar lo antes posible, matándonos a dietas demasiado estrictas, porque no nos van a hacer ningún bien. Si hemos ganado peso, la pérdida del mismo debe ser progresiva para que sea menos traumática para nuestro propio organismo.
Comenzaremos a hacer ejercicio poco a poco, sin llegar al extremo de cómo lo hacíamos antes de vacaciones, sino tratando de volver a estar en esa misma forma para Febrero, por ejemplo. No podemos empezar cómo lo dejamos, porque nuestro cuerpo no está en la misma forma, por eso debemos volver a habituarnos a hacer ejercicio progresivamente. Beber mucha agua y tomar otros alimentos diuréticos, sobre todo en las primeras semanas, es muy recomendable para eliminar cualquier resto de toxinas que queden en nuestro cuerpo después de las Navidades. Eso, y mucha fuerza de voluntad, son los pilares básicos para volver a presumir de cuerpo cuando llegue la primavera.