Llevar adelante un plan
La dificultad aparece cuando la persona debe concurrir a una reunión o fiesta en que se sirve comida de forma abundante. Frente a esta situación, la persona podría decidir no acudir para no sentirse tentada a comer en grandes cantidades por la oferta disponible de alimentos. Esta decisión puede ser una alternativa, si el plan para adelgazar comenzó hace muy poco tiempo o la persona no está segura de tener un autocontrol sobre sus conductas alimenticias. Si cree que su conducta adictiva le va a ganar es mejor no concurrir al evento.
En cambio, la otra opción es asistir a la fiesta, pero mejor si posee una autoestima elevada, aspecto analizado anteriormente en Gorda. Las fiestas son lugares de socialización y festejo, donde hay gran cantidad de comida disponible y bebidas alcohólicas. Toda persona que esté realizando una dieta para adelgazar deberá elegir aquellas preparaciones alimenticias con menor valor energético, sobre todos a base de verduras. Se deberán evitar aquellos alimentos que aporten gran cantidad de calorías así como el consumo de alcohol.
Se deberá respetar el tamaño de las porciones, pudiendo aumentarla ligeramente si luego se compromete consigo misma a realizar una horas más de actividad en el gimnasio, como forma de quemar las calorías extras consumidas. Tampoco se deberá abusar de este recurso, lo que implica que no se podrá comer libremente todo lo que se desea.
En una fiesta van a existir múltiples tentaciones para comer más, pero deberá siempre tener presente el objetivo que tenemos marcado de alcanzar un peso que mejore nuestra silueta y la calidad de vida. No olvidar que una ingesta muy copiosa de alimento podría determinar varios días de modificación y retraso en el plan para adelgazar planteado.