La industria alimenticia ha diversificado sus productos, actualmente es posible encontrar una amplia variedad e golosinas, dulces y alimentos listos para consumir en los comercios.
La oferta de productos
En este sentido, el consumo de azúcar ha aumentado en forma importante a nivel mundial. Las preparaciones cada vez tienen mayor contenido de azúcar, existen salsas, mayor cantidad de gustos de helados, caramelos diversos y todo lo que podamos imaginar en base a la azúcar.
El azúcar forma parte dentro de los glúcidos y es un elemento fundamental para una adecuada nutrición. En las personas que buscan bajar de peso, su consumo debe reducirse, por su aporte energético que provee y por la conducta adictiva que genera en las personas. Aquellos que consumen habitualmente alimentos dulces tienen una gran tendencia a seguir consumiéndolos, y tiene dificultades para abandonarlos.
El consumo de azúcar, tanto en preparaciones como en su agregado en las bebidas, como las gaseosas debe moderarse para lograr el peso ideal. Esta reducción debe comenzar en edades tempranas, para contribuir a prevenir la obesidad infantil. Los niños no deben tener acceso libre y durante todo el día a dulces, sobre todo golosinas. No constituye un alimento prohibido, pero si que debe consumirse de forma controlada, por el motivo de su aporte nutricional, pero también porque predispone a sufrir problemas odontológicos, como caries.
Como alternativa, para las personas que buscan adelgazar y mantenerse en el peso logrado es la utilización de edulcorantes artificiales, como se ha comentado en Gorda. Los mismos aportar un sabor dulce al paladar con el aporte de escasas o nulas calorías.
No resulta fácil para algunas personas abandonar completamente los productos dulces, si estamos en esta situación la primer medida efectiva es intentar reducir el tamaño de las porciones que consumimos de los mismos. Luego de varias semanas, se podrá reducir nuevamente hasta lograr un estado deseable entre el consumo y el peso ideal.