Uno
El calabacín es una hortaliza originaria de América del Norte, introducida a Europa en el siglo XVI, cuyos habitantes se adaptaron rápidamente a su sabor debido a la practicidad de su fácil almacenamiento durante el invierno.
Desde entonces, el fresco sabor del calabacín acompaña los platillos de diversas culturas alrededor del mundo. Pero, no solamente su sabor es lo que hace atractivo a este vegetal, sino también su aporte vitamínico.
Según una investigación la Asociación Americana de Nutrición (USDA National Nutrient Database for Standard Reference) una persona que ingiere 100 gramos de calabacín, obtiene por lo menos 7 miligramos de vitamina C, 0.35 gramos de vitamina B3 y entre 0.5 y 1.5 gramos de fibra, lo cual permite que mejore notablemente la apariencia en su piel.
La composición de esta legumbre es 95 por ciento agua, lo cual le aporta un bajo contenido calórico, el cual hace a este ingrediente ideal para las dietas, ya que 100 gramos de calabacín aportan aproximadamente 15 calorías.
Entre los nutrientes que aporta al organismo su consumo cotidiano se encuentran: fósforo, potasio, magnesio, fibra, vitamina B9, A, C, E, zinc y selenio; los cuales ayudan a fortalecer los huesos tanto de niños como de adultos mayores, a la vez que propician un buen funcionamiento cerebral.
Asimismo, es preciso mencionar que el consumo de esta hortaliza también disminuye los molestos trastornos digestivos debido a su alto contenido en pectina y celulosa que ayudan al buen funcionamiento intestinal y representan una excelente opción en el tratamiento de padecimientos como la gastritis.
Un eficaz depurativo
Y es precisamente por su alto contenido en fibra que el calabacín es considerado un eficaz ingrediente depurativo que al ser incluido con frecuencia como parte de un régimen alimenticio adecuado y acompañado de una rutina de ejercicio, es un buen método para adelgazar.
Otra de las propiedades del calabacín es que tiene efectos diuréticos y se recomienda su consumo para tratar infecciones urinarias y evitar la aparición de cálculos renales. Así como también es un buen laxante y se cree que tiene propiedades desparasitantes.
Algunos tips
Las propiedades del calabacín son muy extensos, por lo que poco a poco nos iremos adentrando en el tema. Así que espera nuestra siguiente entrega donde te enseñaremos prácticas y deliciosas recetas para comenzar a incluir a este vegetal en tu dieta.
Pero, por lo pronto te damos algunas sugerencias para comprar y conservar esta deliciosa hortaliza:
- Compra calabacines de tamaño mediano, pues son fáciles de cocinar y tienen menos semillas
- Al igual que otros productos de la hortaliza como la lechuga, verifica el peso del calabacín, ya que a mayor peso, mayor frescura.
- Revisa que no tenga marcas, pues éstas también denotan la calidad del vegetal.
- Este cultivo puede conservarse hasta 15 días en refrigeración, pero si decides congelarlo, antes de cocinarlo metelo en una olla de agua hirviendo, lo cual le devolverá su consistencia.
Fuentes: ndb.nal.usda.gov/alimentos.org